CUANDO YA NO HAY NADIE
Me da gusto que nos fuimos
Me da gusto que la alegre rebeldía te haya llevado
Me da gusto que nos desprendimos
De ese mal necesario que tanto soportamos
Fue nuestro feliz choque de inconscientes
Que se queda sellado ahí donde nos necesitamos
Ahí donde fuimos y nos alargamos
Donde tu creías poco en el futuro
Y yo vivía en el pasado, llena de platónicos idealizados.
Sanaste en tu nueva familia,
Sanaré en mi hermosa soledad
Y que no nos vengan a decir que sólo escribiendo se conoce a la gente
Que las distancias son muy grandes para hacer el esfuerzo de conocernos y reconocernos
Que no nos cuenten
Porque de voluntad esta hecho todo
Porque de voluntad estamos hechos, tú y yo.
¿a quien piró (echó) el día anterior a su cumpleaños?
ResponderEliminar